Los desarrolladores han recibido a GitHub Copilot con los brazos abiertos. El asistente de IA que les ayuda a programar se ha convertido en la gran demostración de lo mucho que esta tecnología puede ayudar en ciertos ámbitos profesionales, pero ahora se ha desvelado algo que no intuíamos: ese milagro para los programadores está siendo ruinoso para Microsoft.
GitHub Copilot. El servicio, que Microsoft lanzó en los últimos meses de 2021, se ha ido convirtiendo en una verdadera navaja suiza para los desarrolladores, que lo han convertido en parte integral de su trabajo. Hace un año Copilot ya escribía el 40% del código de lenguajes como Java o Python que se publicaba en GitHub.
La IA es una glotona. Sin embargo, hay un requisito importante en estos sistemas de IA generativa: consumen enormes cantidades de capacidad de cálculo y energía. Eso hace que el coste de los asistentes se dispare, y aunque hace tiempo que Microsoft cobra una cuota mensual de 10 dólares al mes para quienes quieren aprovechar todas las posibilidades de GitHub Copilot, las cuentas no le salen.
Microsoft está perdiendo (mucho) dinero. Como indican en The Wall Street Journal, Microsoft está perdiendo dinero en este producto, que ya tiene 1,5 millones de usuarios. Según fuentes cercanas a la empresa, Microsoft está perdiendo de media 20 dólares al mes con cada usuario. Algunos usuarios intensivos de este servicio están provocando que las pérdidas sean aún mayores, de unos 80 dólares al mes.
Lamborghini para llevar pizzas. En Zoom han intentado recortar los gastos en el uso de IA generativa usando modelo propio algo más modesto, y en Adobe están estableciendo ciertos límites mensuales al uso de su modelo de IA generativa para editar imágenes, además de cobrar según el uso. En WSJ explican que en Zoom sólo usan GPT-4 para las tareas más difíciles porque «hacerlo para resumir un correo es como usar un Lamborghini para llevar una pizza».
Así que cobrarán más. Esta situación es directamente responsable de que Microsoft por ejemplo vaya a cobrar más para nuevas plataformas en las que ofrece IA generativa. Es el caso de Microsoft 365 Copilot, que costará 30 dólares al mes para poder aprovechar estas capacidades, cuando la versión «sin IA» del servicio, que da acceso por ejemplo a Office, cuesta 13 dólares al mes. En Google también cobrará 30 dólares al mes por su versión de Workspace con IA. La versión sin esta capacidad cuesta seis dólares al mes.
La esperanza: que los costes bajen. Como ha sucedido en el pasado, la expectativa es que el coste de estas soluciones baje con el tiempo. Nuevos chips y otras innovaciones podrían reducir los costes de forma crítica, y se espera que el año que viene sea especialmente revelador en cuanto a si estos costes —y sobre todo, las pérdidas— siguen siendo asumibles para las empresas que ofrecen dichos servicios.