En el país, durante el 2021 la Comisión Nacional para el Uso Eficiente de la Energía apoyó alrededor de 61 proyectos municipales, para el reemplazo de 637,000 luminarias LED
Pese a que México cuenta con un marco legal que habla de la eficiencia energética para sistemas de alumbrado público y vialidades, todavía falta una mayor acción para manejar esquemas de mayor tecnología que permitan ahorros a los gobiernos y, especialmente, disminuyan los efectos de la contaminación lumínica para la población.
De acuerdo con Jesús Téllez, líder de conocimiento y investigación de la firma de iluminación Grupo Construlita, el primer gran reto es sustituir todo el sistema de alumbrado público de lamparas de vapor de sodio por componentes LED, para lo cual ya hay un avance al respecto.
«Un primer avance es tener estos cambios tecnológicos en la cuestión de pasar de tecnologías en alumbrado como vapor de sodio a empezar a implementar iluminación LED», declaró Téllez en el marco del Simposium Internacional de la Energía 2023 organizado por la Cámara Nacional de Manufacturas Eléctricas.
Posteriormente, se requieren sistemas de telegestión para automatizar los procesos y generar ahorros importanes en materia energética, lo cual también permitiría recolectar información para tener un mayor control sobre estos esquemas.
«La principal importancia es de qué manera este alumbrado público puede empezar a ser controlado, gestionado automáticamente… la ciudad con los dispositivos de iluminación se vuelven dispositivos inteligentes que detectan o empiezan a leer la ciudad y a generar data, pueden empezar a detectar flujos de personas y flujos de vialidades», declaró Téllez.
Según el especialista, estos sistemas de telegestión podrían aplicarse en la calle Madero del Centro Histórico de la Ciudad de México, la cual tiene una gran afluencia de personas durante el día pero en la madrugada, está casi vacía, lo cual se podría reducir el nivel de iluminación durante ese lapso.
«Obviamente a lo largo del día o mayor parte de la noche, es conveniente que esta calle esté bien iluminada pero de lunes a jueves entre 12 a 5 de la mañana esa calle queda vacía, entonces ya no se tiene el mismo flujo peatonal y requiere atenuar (la iluminación)… Un proyecto de gestión nos va a ayudar en eso», comentó Téllez.
En su ponencia, el especialista señaló los beneficios de un sistema de telegestión, tales como:
- Información constante de los consumos de energía por luminaria.
- Detección de variaciones de voltaje.
- Detección de robo y fugas de energía.
- Notificación en tiempo real y generación de información para realizar una mayor planificación.
Riesgos
De acuerdo con un informe de la Comisión Nacional para el Uso Eficiente de la Energía (Conuee), durante el 2021 esta instancia apoyó 61 priyectos municipales para el reemplazo de 637,973 luminarias LED, en beneficio de más de 12.1 millonesde habitantes y una reducción promedio de 40.1% de millones de kilowatts hora anuales, es decir un ahorro económico de 894.5 millones de pesos anuales para las finanzas municipales.
Para el representante de Construlita, si bien se tiene un avance en la implementación de alumbrado público más eficiente, existe un riesgo de que dicho beneficio solo sea para las grandes ciudades, lo cual dejaría de lado a las pequeñas poblaciones.
«Corremos el riesgo de que pueda existir esta brecha, que a lo mejor no todos los poblados puedan quedar con la misma tecnología, pero estas reflexiones deben de ser sobre la normativa: de qué manera se obliga a las entidades o municipios a que no se genere esta brecha», indicó Téllez.
El especialista destacó que además de un mejor aprovechamiento de los recursos energétnicos, el principal beneficio lo tendría la población con una reducción de la contaminación lumínica.